SALMÓN TRANSGENICO

Una coalición integrada por ambientales, consumidores y organizaciones de pesca comercial y deportiva ha entablado una demanda contra la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA), por haber aprobado, por primera vez, la venta y consumo de un salmón del Atlántico transgénico.

En un comunicado enviado a FIS.comFriends of the Earth explica que el salmón en cuestión fue desarrollado por AquaBounty Technologies, Inc. con el ADN de tres peces: salmón del Atlántico, salmón real del Pacífico y eelpout del océano Ártico.

«La aprobación, por primera vez, de un alimento animal creado en un laboratorio, ha violado las leyes e ignorado los riesgos para el salmón salvaje y las comunidades pesqueras», afirma la ONG.

En la coalición, representada por un abogado del Centro de Seguridad Alimentaria y Earthjustice, participan la Federación de Asociaciones de Pescadores de la Costa del Pacífico, el Instituto de Recursos Pesqueros, la Asociación del Salmón Golden Gate, Kennebec Reborn, Amigos de Merrymeeting Bay, el Centro de Acción Ecológica, Food & Water Watch, el Centro para la Diversidad Biológica, Fiends of the Earth, Cascadia Wildlands y el Centro de Seguridad Alimentaria.

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De acuerdo con el grupo, en la aprobación del salmón transgénico, la FDA determinó que no requeriría el etiquetado del pescado GM para que los consumidores sepan lo que están comprando, lo que llevó al Congreso a solicitar el etiquetado en el proyecto ómnibus de gastos para 2016.

La coalición también advierte que la aprobación de la FDA ignoró los comentarios de casi dos millones de personas que se oponen a la aprobación porque consideran que la agencia no ha analizado y previsto los riesgos para el salmón silvestre y el medio ambiente, así como para las comunidades pesqueras. En este sentido, mencionan el riesgo de que el salmón transgénico pueda escapar y poner en peligro las poblaciones de salmón silvestre amenazadas.

Los demandantes señalan que el salmón transgénico de AquaBounty va a emprender un viaje de 5.000 millas para llegar a los supermercados de Estados Unidos. Esto porque la compañía planea producir los huevos de salmón en la Isla del Príncipe Eduardo, Canadá, y engordarlo en una planta instalada en Panamá hasta que alcance el tamaño comercial. Luego se procesará en filetes y será enviado a EE.UU. para su venta.

Además, alertan que la firma ha anunciado públicamente planes para criar los peces transgénicos en EE.UU, en lugar de Panamá, y venderlo en todo el mundo. A pesar de esto, indican que la aprobación de la FDA sólo consideró los planes actuales para las instalaciones remotas en Canadá y Panamá, sin estudiar los riesgos de escapes y la contaminación de los salmones salvajes que retornan a los ríos estadounidenses.
Asimismo, la demanda cuestiona la afirmación de la FDA de que tiene autoridad para aprobar y regular los animales genéticamente modificados como «medicamentos para animales» bajo la Ley Federal de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos de 1938.

SALMON TRANSGENICO

Las preocupaciones del grupo surgen del hecho de que cuando los salmones transgénicos escapan o son liberados accidentalmente al medio ambiente, podrían poner en peligro a las poblaciones silvestres mediante al aparearse con especies amenazadas, competir con ellas por los escasos recursos y hábitats, y/o al introducir nuevas enfermedades.

Por último, el grupo hace hincapié en que expertos en peces transgénicos y evaluación de riesgos reconocidos a nivel mundial, así como biólogos de las agencias de fauna de EE.UU. encargadas de proteger los peces y vida silvestre, han criticado en gran medida  la decisión de la FDA de no evaluar estos impactos. Y hace hincapié en que la FDA ignoró sus preocupaciones al emitir su aprobación final. Coalición demanda a la FDA por aprobación de salmón transgénico

Una coalición integrada por ambientales, consumidores y organizaciones de pesca comercial y deportiva ha entablado una demanda contra la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA), por haber aprobado, por primera vez, la venta y consumo de un salmón del Atlántico transgénico.

En un comunicado enviado a FIS.com, Friends of the Earth explica que el salmón en cuestión fue desarrollado por AquaBounty Technologies, Inc. con el ADN de tres peces: salmón del Atlántico, salmón real del Pacífico y eelpout del océano Ártico.

«La aprobación, por primera vez, de un alimento animal creado en un laboratorio, ha violado las leyes e ignorado los riesgos para el salmón salvaje y las comunidades pesqueras», afirma la ONG.

 

En la coalición, representada por un abogado del Centro de Seguridad Alimentaria y Earthjustice, participan la Federación de Asociaciones de Pescadores de la Costa del Pacífico, el Instituto de Recursos Pesqueros, la Asociación del Salmón Golden Gate, Kennebec Reborn, Amigos de Merrymeeting Bay, el Centro de Acción Ecológica, Food & Water Watch, el Centro para la Diversidad Biológica, Fiends of the Earth, Cascadia Wildlands y el Centro de Seguridad Alimentaria.

De acuerdo con el grupo, en la aprobación del salmón transgénico, la FDA determinó que no requeriría el etiquetado del pescado GM para que los consumidores sepan lo que están comprando, lo que llevó al Congreso a solicitar el etiquetado en el proyecto ómnibus de gastos para 2016.

La coalición también advierte que la aprobación de la FDA ignoró los comentarios de casi dos millones de personas que se oponen a la aprobación porque consideran que la agencia no ha analizado y previsto los riesgos para el salmón silvestre y el medio ambiente, así como para las comunidades pesqueras. En este sentido, mencionan el riesgo de que el salmón transgénico pueda escapar y poner en peligro las poblaciones de salmón silvestre amenazadas.

Los demandantes señalan que el salmón transgénico de AquaBounty va a emprender un viaje de 5.000 millas para llegar a los supermercados de Estados Unidos. Esto porque la compañía planea producir los huevos de salmón en la Isla del Príncipe Eduardo, Canadá, y engordarlo en una planta instalada en Panamá hasta que alcance el tamaño comercial. Luego se procesará en filetes y será enviado a EE.UU. para su venta.fda_salmon_etiquetado-680x480

Además, alertan que la firma ha anunciado públicamente planes para criar los peces transgénicos en EE.UU, en lugar de Panamá, y venderlo en todo el mundo. A pesar de esto, indican que la aprobación de la FDA sólo consideró los planes actuales para las instalaciones remotas en Canadá y Panamá, sin estudiar los riesgos de escapes y la contaminación de los salmones salvajes que retornan a los ríos estadounidenses.

Asimismo, la demanda cuestiona la afirmación de la FDA de que tiene autoridad para aprobar y regular los animales genéticamente modificados como «medicamentos para animales» bajo la Ley Federal de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos de 1938.

Las preocupaciones del grupo surgen del hecho de que cuando los salmones transgénicos escapan o son liberados accidentalmente al medio ambiente, podrían poner en peligro a las poblaciones silvestres mediante al aparearse con especies amenazadas, competir con ellas por los escasos recursos y hábitats, y/o al introducir nuevas enfermedades.

Por último, el grupo hace hincapié en que expertos en peces transgénicos y evaluación de riesgos reconocidos a nivel mundial, así como biólogos de las agencias de fauna de EE.UU. encargadas de proteger los peces y vida silvestre, han criticado en gran medida  la decisión de la FDA de no evaluar estos impactos. Y hace hincapié en que la FDA ignoró sus preocupaciones al emitir su aprobación final.

 

Mas informacion aquí:https://youtu.be/wjX1ewL5wq4