Autosuficiencia de producción lechera en cinco años con políticas adecuadas
Ciudad de México, 11 de marzo.- México puede revertir en cinco años ser el mayor importador de leche en el mundo, además de que en la actualidad el 30 por ciento del consumo se sustenta en importaciones, observó Vicente Gómez Cobo, presidente de la Federación Mexicana de Lechería (Femeleche).
La condicionante es que se pongan en práctica políticas públicas adecuadas, para fortalecer la viabilidad del sector. Gómez Cobo, explicó que los productores nacionales tienen la capacidad para responder a la demanda local, pero es necesario un empuje desde instancias oficiales.
“Hace falta que como país le dediquemos las políticas públicas y los recursos para que la actividad sea viable”, puntualizó Vicente Gómez, durante la presentación del 10° Foro Internacional de Lechería, que se llevará a cabo el 3 de abril en la ciudad de Chihuahua, el cual estará enfocado analizar cuáles son las políticas públicas que se requieren para impulsar la actividad.
El directivo alertó, que de no haber un cambio en la atención a este sector primario, se podría llegar al punto de que para el 2050 la mitad de la demanda de leche en el país sea cubierta con importaciones, riesgo latente cuando se toma en cuenta que México es el país más abierto a la importación de leche en el mundo.
Entre medidas que requiere el sector está la política monetaria que no sea restrictiva y permita a los productores nacionales, acceder a préstamos a tasas tan competitivas como sus contrapartes en el extranjero, como, por ejemplo, en Estados Unidos.
Además, es necesario atacar la competencia desleal que sufren los productores nacionales con el trasiego de becerros por la frontera sur del país, mismo que se estima en aproximadamente 500.0 mil animales al año.
“Éstos inundan el mercado local a un valor muy por debajo del precio de mercado, impidiendo que los becerros nacionales tengan cabida. El daño para los productores por esta situación se estima en 5.0 mil millones de pesos al año”.
Asimismo, se requiere mayor celeridad de instancias como el Servicio de Administración Tributaria (SAT), al momento de ejecutar las devoluciones de impuestos y con ello evitar que se detenga el flujo y el dinamismo de recursos para mantener la producción.
IMPACTO DE ARANCELES
Con respecto a la posible imposición de aranceles por parte de Estados Unidos, Vicente Gómez Cobo comentó que la incidencia sobre el sector de la lechería ocurriría si México aplica una medida espejo, esto debido a que el 70 por ciento del precio de los insumos para los productores están dolarizados.
Recordó que la exportación de leche hacia Estados Unidos es muy pequeña y a zonas muy específicas, por lo que la afectación en ese sentido sería marginal.
El año pasado la producción de leche en el país creció 2.5 por ciento en parte por la disponibilidad de insumos a buen precio, situación que se podría revertir si se produce confrontación arancelaria entre ambas naciones.
Mencionó la falta de financiamiento sobre todo para los pequeños y medianos productores, mencionó que es insuficiente el apoyo que realizan los Fondos Instituidos en Relación a la Agricultura de Banco de México (Fira), ya que su labor es de institución de segundo piso, destinado a los grandes productores, y lo que se requiere es trabajo de primer piso que trabaje con los productores de menos escala.
CHIHUAHUA CON VOCACIÓN AGROPECUARIA
Por su parte, el secretario de Desarrollo Rural del estado de Chihuahua, Mauro Parada Muñoz, recordó que la entidad encabeza la exportación a Estados Unidos de ganado en pie con 200,000 cabezas de becerros al año. La entidad pese a la sequía permanente en que se encuentra, que ha sabido trabajar el sector con manejo adecuado y de conservación a la escasa agua existente.
Chihuahua, reporta ser productor importante de nuez, cebolla, y chile. Parada Muñoz, apostó a que los aranceles que imponga Estados Unidos, sea medida pasajera. (Redacción MEXICAMPO).
