Los sectores más pobres del país, pagan un sobreprecio de hasta 98.2 por ciento en productos básicos como tortilla, huevo, carne, leche y vegetales, ante la falta de competencia, así como por regulaciones y acciones de política pública, que fomenten la participación de más empresas.

Debido al poder de mercado que tienen las empresas en México, las familias pagan sobreprecios por lácteos, carnes procesadas y medicinas, reconoce la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece). 

“Para las autoridades salientes como las entrantes, se debe comprometer, en cada orden de gobierno legislar para revertir los altos costos por la falta de competencia”.  

Por la falta de una cultura de competencia, en el país los hogares mexicanos pierden, además en promedio, 16 de cada 100 pesos de su ingreso por los sobreprecios generados en mercado principalmente sobre 12 bienes y servicios de consumo generalizado y de alta demanda. 

En un análisis del departamento de economía de The Pennsylvania State University, para la Cofece, indica que cuando una empresa puede subir precios y retener a sus clientes es porque tiene pocos o ningún competidor. 

Se reveló que el daño al poder adquisitivo afecta en mayor medida a las familias más pobres, ya que la pérdida en su ingreso llega a 31 de cada 100 pesos, cifra que es 4.4 veces mayor respecto a lo que pierden las familias con más recursos. 

El estudio analizó el gasto en artículos como tortilla de maíz, pan, pollo, huevo, carne de res, carnes procesadas, lácteos, frutas, verduras, bebidas no alcohólicas, medicamentos, transporte foráneo de pasajeros y materiales de construcción, en los que encontró que existe un sobreprecio promedio de 98.2 por ciento, resultado del poder de mercado que prevalece en esos productos por parte de algunas empresas. 

En el caso de las frutas, son los productos con mayor sobreprecio al alcanzar 238 por ciento, en tanto el pan llega a 200 por ciento, los materiales de construcción a 113 por ciento, y los lácteos, 95 por ciento. Los de menor incremento son las bebidas no alcohólicas con 5 por ciento, los medicamentos con 4 por ciento y las carnes procesadas con 2 por ciento. 

“Al comparar la pérdida relativa del bienestar por regiones del país, es clara la brecha entre el norte con respecto al sur”, de acuerdo a Cofece. “Así, el suroeste (Chiapas, Guerrero y Oaxaca) ve reducido su bienestar 47 por ciento más que el noroeste (Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Sinaloa y Sonora)”.  (REDACCIÓN MEXICAMPO).