Unilever con Maizena incumple con normas mundiales de nutrición
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Mientras que fortifica inadecuadamente de zinc, hierro y vitaminas otros productos de la marca Maizena, de venta en México
Ciudad de México a 17 de septiembre de 2019.- Unilever, una de las empresas de producción de alimentos más grande del mundo, está incumpliendo sus compromisos de nutrición concertados a nivel global, expuso la fundación Changing Markets, Proyecto Alimente y ContraPESO a partir de su más reciente reporte sobre fortificación de harinas en México.
La fundación internacional recordó que Unilever se posicionó en segundo lugar del Índice de Acceso a la Nutrición 2018 – Access to Nutrition Index–, la última evaluación sobre el compromiso de la industria con la nutrición, mientras que la empresa ha declarado que fortifica aquellos productos populares y más asequibles en países donde prevalecen problemas de malnutrición, como sucede en México.
Incluso en la página oficial de la marca Maizena, de Unilever México, la empresa afirma que desde la década de 1990, sus productos de harina de maíz son voluntariamente enriquecidos con ‘vitaminas y minerales’.
De acuerdo a Euromonitor International 2018, una investigación sobre salud y bienestar, las ventas globales de alimentos y bebidas fortificados y funcionales del Grupo Unilever fue de 190 millones de dólares en 2018, con pronóstico de 24% de crecimiento de este mercado en los próximos 5 años.
A pesar de esto, el reporte de Changing Markets reveló que hay una falta de consistencia entre los compromisos internacionales pactados por Unilever en cuanto a la fortificación de sus productos y sus prácticas de negocios en el país, a través de la marca Maizena.
Changing Markets resaltó que la fortificación de alimentos puede ser una herramienta eficaz para combatir carencias nutricionales de la población, como lo son las deficiencias de hierro y zinc, cuando se lleva a cabo de manera efectiva y transparente, así como en combinación con políticas públicas que fomenten el acceso a alimentos nutritivos y saludables, y reduzcan el consumo de alimentos ultraprocesados.
En México, la deficiencia de micronutrientes es un serio problema de salud pública, en vista de que 1 de cada 4 niños menores de cinco años sufren de anemia (deficiencia de hierro) y 9 de cada 10 mujeres no consumen suficiente hierro en su dieta.
Con el objetivo de investigar los niveles de nutrición con los que está comprometida la empresa Unilever, se analizaron los productos de la marca Maizena-Unilever, al ser ésta una marca ampliamente conocida y consumida en el 90% de los hogares en México[1]. Se encontró que, a pesar de lo declarado por la empresa sobre la fortificación de todos sus productos de maíz de venta el Latinoamérica, en México no se adicionan micronutrientes a la harina de maíz Maizena Natural.
De acuerdo al reporte, tan sólo se agregan micronutrientes a los productos saborizados –atoles Maizena Sabores–, lo cuales resultan menos saludables por su nivel de procesamiento e ingredientes. Sin embargo, ni siquiera estos productos a los que sí se les adicionan micronutrientes están siendo fortificados correctamente: se encontró que los niveles de nutrientes en los atoles Maizena es significativamente menor a lo que se registra en la etiqueta del producto, 15% menos en hierro y 9% menos en zinc en promedio. De acuerdo al reporte de Changing Markets, ninguna de las muestras analizadas contiene los niveles de hierro que dice tener el producto y la mayoría de las muestras resultó con niveles más bajos de zinc en comparación con lo que se marca en la etiqueta.
Sources: Pruebas de muestras; etiquetas de los productos.
Rojo: nivel de micronutriente claramente inferior al nivel que marca la etiqueta
Ambar: incierto si el nivel de micronutriente es igual a lo que marca la etiqueta*
Verde: nivel de micronutriente claramente el mismo que marca la etiqueta*
Alice Delemare de Changing Markets explicó: “Unilever afirma que están comprometidos para enfrentar la malnutrición por deficiencias de micronutrientes en el mundo, sin embargo, nuestro reporte muestra que la empresa está incumpliendo este compromiso al llevarlo a la práctica.
Unilever tiene la responsabilidad de explicar por qué su producto Maizena Natural no está fortificado, a pesar de que el discurso global de la empresa sobre fortificación reclama lo contrario, y por qué los niveles de hierro y zinc en los productos saborizados, los atoles, no cumplen con los niveles que prometen sus etiquetas. Si la empresa realmente está comprometida a enfrentar el problema de la deficiencia de micronutrientes y aumentar el consumo de vitaminas y minerales esenciales de los consumidores, como lo ha declarado, Unilever tiene que actuar inmediatamente para resolver las inconsistencias entre el discurso y la práctica, y así poder cumplir con sus compromisos públicos”.
Desde 2002, la Ley General Salud establece el enriquecimiento obligatorio de las harinas de maíz y trigo de venta en México, y de acuerdo a los estándares actuales, tanto la harina de trigo como la de maíz nixtamalizado deben adicionarse con hierro, zinc, ácido fólico y vitaminas B1, B2 y B3. Sin embargo, como expone el reporte de Changing Markets, los productos de la marca Maizena, de Unilever, no cumplen con estos estándares al encontrarse que, en principio, parecen no ser productos de harina de maíz nixtamalizado; cuando desde la década de 1990 Unilever se comprometió a que sus productos de harina de maíz sean voluntariamente enriquecidos con vitaminas y minerales. Ana Larrañaga, Coordinadora de la Coalición ContraPESO, resaltó que las organizaciones de la sociedad civil en México demandarán acción ante estos resultados. “La población mexicana enfrenta una doble carga de malnutrición; por un lado, existe una enorme oferta y promoción a productos no saludables que causan obesidad y enfermedades crónicas, mientras que por otro, las industrias fallan en fortificar adecuadamente sus harinas, dejando en una gran desventaja a las familias en riesgo de desnutrición”, explicó.
El reporte de la fundación Changing Markets también genera preocupación sobre la falta de información por parte de Unilever respecto a la fuente de hierro utilizada en sus productos: “Si Unilever está usando una de las fuentes de hierro de menos biodisponibilidad, no está fortificando las mezclas de harina para atole efectivamente”, explicó Alice Delemare.