Ciudad de México, a 11 de diciembre del 2017.- En el marco del Día Nacional de la Flor de Nochebuena y luego de la promulgación del Decreto que la declara patrimonio intangible del estado de Guerrero, investigadores de la Universidad Autónoma Chapingo, encabezados por Pedro Ponce Javana, Subdirector de Extensión y Servicio,  pusieron en marcha un programa de preservación del germoplasma y banco estatal de semillas a fin de incrementar su producción a través del mejoramiento genético, impulsar la cocina gourmet y certificar sus cualidades medicinales.

Entre los objetivos es incrementar el consumo per cápita de Flor de Nochebuena a más de tres piezas por familia mexicana, trasladar los beneficios alimenticios de la flor a la mesa de la población y hacer públicos los atributos medicinales de la misma para que la economía del sector se potencialice en el corto y mediano plazo.

Pedro Ponce Javana, Subdirector de Difusión y Extensión Universitaria de la UACh, junto con los profesores investigadores José Mejía y Armando Flores, señalaron  que si bien en México se producen al año más de 30 millones de macetas de Flor de Nochebuena, a nivel mundial la comercialización supera los 200 millones de macetas que se venden en época decembrina.

Por ello y debido a que México es país origen de esta flor, consideraron urgente incrementar la producción y la difusión para el consumo de la misma en coordinación con los productores del Consejo Mexicano de Flor de Nochebuena.

En el marco del 1er. Foro y Festival de la Flor de Nochebuena en Taxco, Guerrero, los investigadores hicieron un llamado a la Sagarpa para que incorpore a la Red Nacional de Germoplasmas, el Banco Vicente Guerrero ubicado en una mina del municipio de Taxco donde se preservan más de 50 variedades de semilla de Flor de Nochebuena y de otros alimentos.

También exhortaron al Gobierno Federal a salvaguarda a esta planta originaria de Taxco de Alarcón, Guerrero, ya que es identidad nacional, cultura e historia así como “embajadora de la navidad en el mundo”.

Ahí se indicó que la flor puede ser consumible en gelatina, mouse, tamal, guisado de pollo, puerco o carne de res, así como en tacos de Flor de Nochebuena y hasta salsas picantes, ya que no es venenosa.

En el apartado medicinal, indicaron, se siguen haciendo estudios pero solo podrían reportarse algunas irritaciones o molestias estomacales en personas sensibles.

Se tiene conocimiento de que se utilizó hace miles de años atrás para atacar dolor de muelas y depilación en Guatemala. En México ayudó a producir leche en madres, elimina mezquinos, varias afectaciones cutáneas y alivia dolor del cuerpo. Sin embargo, aún falta investigación para conocer que no causa daño a las personas.

Los profesores-Investigadores, Pedro Ponce Javana, José Mejía, Armando Flores y… integrantes del Programa de Extensión y Vinculación Universitaria PEEVU de la Universidad Autónoma Chapingo, aseguraron que debido a que esta Flor “enamora” y es la más vendida en el mundo por representar La Paz y la armonía, es indispensable reactivar la economía entre el pequeño y mediano productor dándole valor agregado a esta Flor.

Ante esta necesidad, consideraron en el encuentro con especialistas, escritores, investigadores y productores, impulsar los bancos de germoplasma a nivel nacional para que no se queden como “bodegas inútiles” pues es necesario producir la semilla propia y dejar de importarla de Estados Unidos, Italia, Francia y Alemania.

Para los investigadores de la Universidad Autónoma Chapingo, fue un error desaparecer la Productora Nacional de Semillas (PRONAE), y ahora tenemos déficit de semilla y tampoco hay viveros que produzca las plantas nativas en México.

Por ello propusieron hacer de cada pueblo un banco de semillas propio así como crear mejoradores de semilla.

La sustentabilidad, dijeron no es si no hay conservación y los bancos son la base sustentada en las comunidades, concluyeron. (CODICS).