Autoridades de Monclova, Coahuila intimidan a habitantes del Cerro de la Gloria, con el propósito de despojarlos de su propiedad, bloqueando el acceso a sus hogares con arena y cascajo, toda vez que el gobierno municipal está actuando a las órdenes de la inmobiliaria “Bienes Raíces Amistad”, propiedad de los hermanos Arturo y Alfredo González Palma.

“Es un acto agresivo y depredador contra nosotros; se necesitan muchos hombres, mucha maquinaria para hacer un bloqueo de este tamaño; nosotros tenemos aguajes, de donde podemos obtener agua para nosotros y nuestros animales y también fueron llenados de tierra”, comentó el líder comunero, después de haber encontrado los caminos de acceso a sus hogares bloqueados.

Los comuneros sostienen que a pesar de haberse denunciado tal situación, el gobierno municipal (a quien denunciaron como responsable), así como el ministerio público ha hecho caso omiso a sus denuncias, las cuales no han procedido. Por el contario, ya existen 49 demandas en contra del grupo de comuneros por parte de la inmobiliaria, las cuales sí han surtido efecto.

Al no existir respuesta por parte de las autoridades municipales ni estatales, los comuneros optaron por recurrir a la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA) para establecer un proceso de negociación con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) “quien se encargará de declarar que los terrenos del Cerro de la Gloria son terrenos nacionales, por lo tanto, quedarán sin efecto las escrituras apócrifas que presentó la inmobiliaria y así terminará el problema”, señaló el líder campesino.

La primer acción de hostigamiento contra los comuneros se dio cuando la inmobiliaria apareció con escrituras avaladas supuestamente por el catastro municipal, iniciando así un proceso de despojo en contra de los comuneros habitantes del cerro.

El 13 de febrero del presente año, las casas de los comuneros fueron destruidas con maquinaria pesada por parte de la inmobiliaria, como un mecanismo de intimidación y así propiciar el desalojo por parte de los comuneros. En aquella ocasión incluso Arturo González Palma, dueño de la inmobiliaria se presentó junto con varias personas y maquinaria pesada para demoler las viviendas y la infraestructura destinada a la crianza de ganado por parte de los comuneros.

Los habitantes del Cerro de la Gloria comentaron que acciones como la del viernes pasado, donde los caminos para llegar a sus hogares fueron bloqueados, seguirán ocurriendo mientras la Sedatu no declare que los terrenos del cerro son nacionales y por lo tanto nadie puede comprarlos o venderlos porque justamente pertenecen a la nación.