México no teme al futuro del TLCAN agropecuario
La diversificación de mercados en todo el mundo es la respuesta de ante la incertidumbre que provoca el futuro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), afirmó el presidente de la Asociación Mexicana de Secretarios de Desarrollo Agropecuario (AMSDA), Héctor Padilla Gutiérrez, quien presentó el caso de Jalisco que exporta a 88 países productos agroalimentarios.
Desde hace 23 años, reconoció, Estados Unidos es el principal comprador de lo que se produce en el campo mexicano debido a que clima no es tan bondadoso como el nuestro, pero también es el mayor exportador de maíz amarillo, alrededor de 8 millones de toneladas anuales, que en el país ocupamos para la alimentación del ganado, por lo que se estima que de abandonar el TLCAN el gobierno del Donald Trump deberá enfrentar dos graves problemas que son atender la demanda de los estadounidenses de alimentos mexicanos y qué hacer con el grano que se quedará en sus bodegas.
El presidente de la AMSDA dijo que los productores mexicanos de alimentos no temen al resultado de renegociaciones del acuerdo, pues la ruta es ampliar los mercados y, como prueba, recordó que el pasado 20 de diciembre en su calidad de titular de la Secretaría de Desarrollo Rural de Jalisco, y a nombre del gobierno del Estado, firmó un convenio con la organización Rainforest Alliance con el objetivo de facilitar y diferenciar productos amigables con el medio ambiente, hecho que convierte el campo aguacatero jalisciense en el primer sector en asumir el reto de la certificación verde. El funcionario precisó que este acercamiento se concretó con un convenio marco de cooperación con este organismo internacional y que traerá consigo pro
ductos diferenciados con acceso a nichos de mercado que premian el enfoque sustentable de su proceso productivo.
En ese evento, explicó, se reconoció la actitud de la rama del aguacate de la Asociación de Productores y Exportadores de Jalisco (APEAJAL), por el compromiso de apostar a favor del medio ambiente y la biodiversidad, de modo que el crecimiento económico se traduzca también en desarrollo sustentable.
El responsable de la SEDER detalló que la agenda de certificación de las plantaciones de aguacate representa compromisos muy precisos en materia de la normatividad del uso de suelo, tratamiento de aguas, condiciones laborales de trabajadores, uso de agroquímicos y respeto a corredores de fauna, entre otros puntos de una agenda que traerá la firma del convenio y con ello, un producto diferenciado en buenas prácticas de respeto ambiental.
Padilla Gutiérrez hizo énfasis en que el dinamismo económico que ha tenido el aguacate en los años recientes en el sector rural jalisciense, ahora completará el perfil de este producto con la marca de la certificación ambiental de Rainforest Alliance, lo que le traerá dividendos al ingresar a mercado exigentes, además de cumplir a cabalidad el reto de un desarrollo sustentable.
Aclaró que esta certificación es diferente y complementaria a la que otorga el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Alimentaria (SENASICA) y precisó que si en 2012 se producían en Jalisco 40 mil 485 toneladas de aguacate, para el presente año se estima se pasarán las 170 mil 320 toneladas, lo que tendrá un valor de dos mil 540 millones de pesos. Cierto es, admitió, que por cuestiones administrativas este fruto jalisciense aun no entra a Estados Unidos, aunque en 2016 se exportaron 69 mil toneladas a Canadá, países de Europa, Japón, Centro y Sudamérica, Hong Kong y Medio Oriente.
Héctor Padilla destacó que actualmente Jalisco exporta productos agropecuarios a 88 países y que algunos de estos mercados tienen especial interés por tener certeza sobre los procesos de producción, asegurando a los consumidores que el producto que están comprando ha sido cultivado y cosechado usando prácticas ambientales y socialmente responsables.
Por medio de este convenio y el trabajo en conjunto se busca que la certificación les permita a los productores abrir o mantener mercados internacionales, así como impulsar el desarrollo rural sustentable bajo en emisiones en Jalisco.
Rainforest Alliance trabaja con todos los actores a lo largo de la cadena de valor desde productores primarios hasta el sector privado y el consumidor final, con el fin de generar un ecosistema que permita la conservación y uso sustentable de los recursos naturales basada en el acceso a mercados diferenciados.