Al buscar nuevas alternativas terapéuticas contra la amibiasis, enfermedad endémica de México, la científica del Instituto Politécnico Nacional (IPN), María Esther Ramírez Moreno, encontró que en las hojas de la planta Petiveria alliacea, conocida comúnmente como hierba del zorrillo, se encuentra un metabolito muy efectivo contra el parásito Entamoeba histolytica, causante de la afección.

La experta en biomedicina molecular explicó que actualmente dicho padecimiento se trata con Metronidazol, pero este fármaco genera efectos colaterales y ya hay reportes de casos de resistencia, sobre todo en pacientes con absceso hepático amebiano, por ello se requieren otros compuestos que ayuden al alivio eficaz sin producir daño.

La investigadora de la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía (ENMH) indicó que una opción viable para la búsqueda de nuevos tratamientos la brindan las plantas. Dijo que en México más del 80 por ciento de la población aún emplea medicina tradicional para tratar sus malestares, por ello el proyecto se basó en el conocimiento etnobotánico para validar científicamente el uso que la población le da a la hierba del zorrillo.

Aunque la planta crece en varias entidades del país, la usada para los experimentos se recolectó en Catemaco, Veracruz; el primer paso fue identificarla taxonómicamente, posteriormente la procesaron y obtuvieron extractos acuosos y metanólicos para determinar sus componentes.

La investigadora politécnica señaló que después de fraccionar los extractos metanólicos obtuvieron diferentes concentraciones de las que extrajeron distintos metabolitos, los cuales evaluaron para verificar su efecto contra E. histolytica.

“Uno de los metabolitos que purificamos, que es de naturaleza terpénica, mostró muy buena actividad al ponerlo en contacto con el parásito, ya que después de 48 horas de incubación inhibió el crecimiento del protozoario en 50 por ciento”, explicó.

Al probar dicha sustancia en células de mamífero, se corroboró que no causa toxicidad en las concentraciones en que se utilizó para inhibir el crecimiento del parásito.

La doctora María Esther Ramírez Moreno informó que el siguiente paso será emplear diversas técnicas de biología molecular para dilucidar los mecanismos de acción mediante los que dicho metabolito ejerce su efecto antiamebiano.

Además probarán el extracto crudo, las fracciones, subfracciones y el compuesto aislado sobre otros protozoarios de interés en la salud humana.

En el proyecto contó con la colaboración de Lizeth Zavala Ocampo, quien obtuvo el grado de Maestra en Ciencias en Biomedicina Molecular con la investigación y de las investigadoras de la ENMH, Laurence Marchat Marchau, Jacqueline Soto Sánchez y Nury Pérez Hernández.

Asimismo Eva Aguirre Hernández, de la Facultad de Ciencias y Alejandro Dorazco González de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México, además de Kaira Abigail Villegas Aveldan, estudiante de la carrera de Biotecnología de la Universidad Tecnológica de Tecámac.