Ciudad de México, 24 de marzo.- La crisis actual en los aumentos en el precio del maíz no responde a un problema de abasto, sino a una especulación financiera derivada de temas internacionales, que impacta el precio final del maíz.

La situación representa una acción en contra de la estabilidad económica de nuestro país y de nuestra soberanía alimentaria, sostuvo el Movimiento Sin Maíz no hay País.

México produce suficiente maíz blanco para abastecer los 13 millones de toneladas anuales que se requieren para elaborar tortillas de masa de auténtico nixtamal -6.5 millones de toneladas- y para fabricar harina de maíz para tortillas, otras 6.5 millones de toneladas.

El maíz que se importa es maíz amarillo, para usos industriales, entre otros alimentos procesados para aves, ganado, cerdos.

“No podemos permitir que el maíz para tortillas se emplee en la industria, el ganado y no en nuestro principal alimento. Tampoco debe tolerarse que los fabricantes de harina para tortillas utilicen maíces amarillos de mala calidad”.

Es urgente la creación de un organismo nacional que regule y establezca referentes comerciales nacionales basados en la oferta y demanda interna tomando como prioridad el consumo humano y por ende nuestra soberanía alimentaria.

“Urge que en México se produzca el maíz blanco y maíz amarillo que se requiere para cubrir las prioridades de nuestra alimentación. Es una meta que se puede alcanzar. Solo así tendremos seguridad, pero sobre todo soberanía alimentaria”.

Contar con tortillas elaboradas con solo maíz de buena calidad, sin agrotóxicos y sin transgénicos, nixtamalizado exclusivamente con cal y agua, es un derecho de las y los mexicanos y un asunto de seguridad nacional, que privilegia nuestra cultura milenaria y mejora la alimentación, sana, nutritiva y saludable.

Una de las prioridades de todo gobierno es cubrir las necesidades básicas de alimentación de los y las ciudadanas.

En México, el derecho a una alimentación sana, suficiente y de calidad está consagrado en el artículo 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

La tortilla es el principal alimento de los y las mexicanas. Proporciona en promedio cerca de 45 por ciento de las calorías, 40 por ciento de las proteínas y 50 por ciento del calcio que se requiere. En el campo pueden aumentar los porcentajes hasta llegar a 70 por ciento de las calorías y 50 por ciento del consumo diario de proteínas.

Sin Maíz no hay País, subrayó que en los últimos años se ha reducido el consumo de tortillas en México, “debido al precio y a la mala calidad de los productos que se añaden a la producción de las tortillas. Se les ha sustituido por alimentos chatarra que han provocado una grave epidemia de obesidad y de diabetes. Estas enfermedades tienen altos costos sociales y económicos, no habrá presupuesto de salud que alcance para atenderlas”.

Esta situación puede agravarse por el alza injustificada del precio del maíz y la falta de una política que regule el comercio del grano y vigile la normatividad para la producción de la tortilla.  Las comercializadoras están cerrando sus puertas o condicionando la venta del grano.

El maíz supera precios jamás vistos. El mercado de abasto es incierto.

En México hay producción suficiente de maíz blanco para tortillas, pues se cosechan 24 millones de toneladas cada año. El alza es de precio es producto de la especulación financiera injustificada que no merecemos las y los mexicanos.

Desde la Campaña Nacional sin Maíz no hay País, llamó a las autoridades en sus diferentes niveles de gobierno para que ejerzan acciones contundentes de manera pronta y expedita ante la actual crisis de precios. (Redacción MEXICAMPO).