Ciudad de México a 28 de octubre de 2015.-Los magistrados de la  Suprema Corte de Justicia de la Nación, emitirán hoy su fallo a favor o en contra del amparo que promovieron apicultores mayas de la Península de Yucatán, afectadas en su actividad apícola por la siembra de 253 mil hectáreas de soya transgénica de Monsanto.apicultores de la Península de Yucatán, confían en que el fallo les favorecerá.

Hace apenas dos días estos apicultores junto con otras organizaciones sociales hicieron entrega en la SCJN de más de 63 mil firmas de apoyo que recibieron de la sociedad civil en todo el país, que exige a los magistrados fallar a favor de la consulta y de un principio precautorio para la siembra de la semilla

Angélica María Ek Canché y Gustavo Huchin Cauich, este último promotor de la consulta, expresaron su confianza en la decisión de los magistrados y les solicitaron que los ayuden y salvar esta actividad económica, que permite la subsistencia de 15 mil familias en los estados de Campeche, Quintana Roo y Yucatán, donde se produce la mejor miel del país.

Denunciaron que los cultivos de soya transgénica, cercanos a sus tierras y apiarios, han provocado una disminución en el número de abejas durante el período de producción y en consecuencia en la producción de miel.

 Huchin Cauich, sostuvo que de continuar el cultivo de soya transgénica, la actividad de miles de personas desaparecerá, agudizando aún más sus condiciones de pobreza, pues su principal comprador que es el mercado europeo,  busca la miel mexicana por estar libre de transgénicos.

Para las organizaciones amibientalistas que apoyan a los apicultores: Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad, UNORCA, GREEN PEACE, Demanda Collectivo de Maíz, Colectivo de Transgénicos, entre otras, consideran que el uso de semillas transgénicas viola el derecho a un medioambiente sano, por el uso excesivo de plaguicidas y la deforestación que implica..

Hace 18 meses, por un amparo que interpusieron los apicultores, cuatro jueces locales frenaron el permiso de Monsanto, sin embargo la empresa y el Gobierno federal impugnaron el fallo que será abordado en los siguientes días por la Suprema Corte.

En 2012, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) autorizó a la empresa de transgénicos Monsanto la siembra de soya en 253 mil hectáreas en la Península de Yucatán, la Planicie Huasteca y Chiapas.

Los apicultores y las comunidades mayas acudieron ante la justicia federal al considerar que se vulneraban sus derechos a la consulta libre, previa, informada y culturalmente adecuada; al medio ambiente sano, y se hacía caso omiso al principio precautorio. Estos argumentos les fueron reconocidos por jueces federales mediante sentencias emitidas en 2014.

Sin embargo, las sentencias a su favor fueron impugnados por la Sagarpa y por Monsanto. El caso llegó a la SCJN dado a su trascendencia y relevancia, y la posible afectación o alteración de valores sociales, así como la convivencia y bienestar para las comunidades apícolas mayas que habitan en la Península de Yucatán.

Las organizaciones denunciaron que de aprobarse la siembra de soya genéticamente modificada en la Península de Yucatán terminaría con un círculo virtuoso en una región en la cual la apicultura ha fomentado un desarrollo humano sustentable durante años.

Hoy el más alto tribunal del país puede detener el avance de la siembra de soya transgénica en México y pronunciarse en contra del permiso de las 253 mil hectáreas de soya.