Productores de leche en manos del coyotaje
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Se ven obligados por la reducción de compras de leche de LICONSA
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Más de 150 mil lecheros en pequeño, en riesgo de dedicarse a “vender pepitas” por la amenaza de ser desplazados del mercado de lácteos
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Aparece en ranchos ganaderos una “red de compradores furtivos” de leche a pequeños productores del alimento
Ciudad de México, 8 de noviembre de 2017.- La producción nacional de leche ha entrado en una etapa de incertidumbre en cuanto al precio de comercialización. La empresa LICONSA ha dejado de comprar el 30 por ciento del volumen adquirido en 2016, mientras que el precio de 6.05 pesos por litro que paga actualmente, es menor en 15 centavos respecto del que pagaba a pequeños y medianos productores hace 9 años.
Las empresas privadas de derivados lácteos se ubican por arriba del precio de LICONSA y pagan promedios que van de 6.20 a 6.50 pesos el litro. Es decir, “es la señal de que el precio de LICONSA ha dejado de ser referencia, con el resultado de que ahora los pequeños y medianos productores serán absorbidos prácticamente por el creciente coyotaje”, señaló el dirigente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, Álvaro González Muñoz.
Después de que, por muchos años el precio que pagaba la empresa LICONSA por la leche fluida para sus programas sociales, especialmente para núcleos de población de escasos recursos económicos, en la actualidad ya no es referencia y una “red de compradores furtivos“ aparecen por muchos ranchos para ‘agarrar ahorcados’ a los pequeños productores lecheros. Les dicen: “o me vendes tu producto a tal precio (bajo regularmente) o se te echa a perder”. “Y no hay otra cera, más que la que arde”, dijo González Muñoz.
En el estado de Jalisco, principal entidad productora de leche de vaca, con un volumen de 6 millones de litros diarios, alrededor de 2.5 millones de litros se comercializan a través de ‘acopiadoras’, que son los intermediarios. En un momento de apuro, aun a costa de la economía de los pequeños productores, estos compradores son una salvación, antes de que la leche se fermente y se pierda, porque no existen redes de frío.
El acopio de leche no es nuevo, dijo Álvaro González. “Lo viene practicando la empresa Nestlé desde hace más de 80 años, con el resultado de que “la empresa cada vez es más rica, pudiente, y los productores lecheros más pobres”, aseguró el líder de los pequeños y medianos productores de leche.
Por otra parte, señaló que los negociadores mexicanos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, no mencionan “ni por equivocación” el tema de la leche y la necesidad que han planteado los productores de salir de este ‘intercambio comercial’ por desventajoso para la economía nacional y, sobre todo, para la economía de los pequeños y medianos productores –“es la más feroz competencia”—lo recomendable es salir del mercado de la leche, por lo menos en el marco del TLCAN.
Señaló que a pesar de diversas solicitudes que han hecho a las dependencias federales para plantear sus problemas, especialmente relacionados con la comercialización, han encontrado las puertas cerradas, en particular de la Secretaría de Economía.
Lo que nos preocupa actualmente, añadió, es el futuro que espera a más de 150 mil pequeños productores que ven con incertidumbre, primero, el problema de comercialización nacional, y, segundo, la fuerte competencia representada por las importaciones de leche en polvo, lo cual limita el crecimiento nacional de la ganadería lechera, y que se pierda una tradición de cinco o seis generaciones de ganaderos de esta especialidad, por falta de apoyo gubernamental.