• Con métodos biotecnológicos contribuyen a aumentar calidad y cantidad de diversos cultivos

Con el propósito de contribuir a incrementar y diversificar la producción agrícola nacional, investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) desarrollaron métodos de apoyo biotecnológicos que permiten aumentar calidad y cantidad de diferentes tipos de hortalizas.

El especialista del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR), Unidad Durango del IPN, José Natividad Uribe Soto, ha liderado varios proyectos para generar y adaptar paquetes tecnológicos, como el denominado “Evaluación de diferentes tamaños de celda en la producción de tomate, con relación a su rendimiento”, con el cual se ha logrado incrementar la productividad hasta 100 por ciento, además de obtener productos con calidad de exportación.

“Con este trabajo pretendemos demostrar que con un sistema de raíces mejor desarrollado podemos proyectar una mayor producción en el tomate rojo y pimiento morrón, pero esta tecnología puede aplicarse a otro tipo de cultivos”, informó.biotecnológicos

El investigador explicó que para lograr lo anterior, en el CIIDIR se lleva a cabo la producción mediante el uso de invernaderos, ya que de esta forma es posible controlar variables como temperatura, humedad relativa, luminosidad, pH, nutrición y manejo fitosanitario, a efecto de que se pueda tener éxito en este tipo de tecnologías, ya que a campo abierto no es posible controlar algunas de estas variables.

Indicó que la aplicación de microorganismos específicos en este sistema de cultivo contribuye a estimular eficazmente su progresión, la sanidad de las plántulas (estadio del desarrollo que comienza cuando la semilla germina y finaliza al desarrollar las primeras hojas), así como a fomentar la elaboración de sustancias impulsoras del crecimiento, de manera que se obtienen plantas más vigorosas y robustas, al mismo tiempo se evitan enfermedades a nivel de raíz y follaje.

“Además aplicamos bioinsecticidas en lugar de insecticidas químicos, que tanto daño provocan. De manera que promovemos una agricultura que tenga el menos impacto posible, tanto al medio ambiente como a la salud humana, lo que permite producir, con mayor calidad y limpieza”, sostuvo. TOMATE DEL INVERNADERO DEL CIIDIR (3)

Uribe Soto señaló que la integración de la primera parte del paquete tecnológico se logra con los resultados alcanzados en el campo experimental; posteriormente se hace la transferencia a los productores, quienes ya no necesitan hacer ningún tipo de prueba, pues se les brindan datos fehacientes de todo el proceso, y mediante una capacitación, pueden aplicar esta tecnología directamente en sus cultivos.

“De hecho ya transferimos paquetes tecnológicos a través de la Fundación Produce Durango. Se otorgó apoyo a organizaciones denominadas sistema-producto, tanto de tomate como de chile, para lo cual trabajamos con operarios mediante el desarrollo de habilidades en el manejo de estas técnicas de producción por alrededor de ocho meses, tiempo en el que se les ofrecieron varios talleres teóricos con mayor énfasis en el aspecto práctico”, expuso.

El investigador puntualizó que actualmente se cuenta con productores que se están e proceso de certificación ante diferentes instancias, a fin de lograr la exportación de pimiento morrón y tomate rojo.